sábado, 6 de agosto de 2011

Mi parto hace 16 meses ;)

Afortunadamente para mi bebe, para mi y para su papá, tuvimos un parto seudo natural maravilloso. Fue en el hospital, pero afortunadamente este hospital esta a favor del parto menos invasivo y apoyan la lactancia.

Las contracciones comenzaron la noche del sábado 3 de Abril de 2010, al principio fueron suaves e irregulares, las iba anotando en una hoja para no perder el hilo, y dormía entre contracciones; al otro día me he duchado, relajado, he hablado muchas cositas con mi bebe en la ducha, he disfrutado de mi ducha caliente (quien iba a decir que no disfrutaría de otra ducha así en muchos meses), me he vestido, he llamado al medico y me ha enviado al hospital; desperté a mi marido, desayunamos y al medio dia cogimos un taxi al hospital. Cuando llegamos me han revisado y para mi sorpresa todavía no estábamos de parto, con apenas 2cm de dilatación no podíamos hacer nada; nos ingresaron y compartimos habitación con una pareja muy maja. Allí pasamos el día, yo con las contracciones no tan fuertes, mi marido dándome masajes y hablando a su bebe en la panza. Llego la noche y las contracciones eran aun irregulares, tenía que pasar la noche allí, no dejaron quedar a mi marido y me senti mal; así que sola en esa habitación, fue un poco triste; empece a sentir contracciones fuertes, pero como no eran regulares, ni tres cada diez minutos, como me habian dicho que debia ser, pensaba que no estaba de parto y que el dolor que sentía no eran aun las contracciones, entonces como serian las verdaderas contracciones si el dolor era ya intenso?.
Así pase toda la noche, dormía entre contracciones, en una silla por que no soportaba la cama, caminando a ratos, mi familia llamando desde el otro lado del mundo para saber como íbamos, mi marido llamando desde casa para saber si todo estaba bien y para hacerme compañia, pero a la 1am le dije que se fuera a descansar por que nos esperaba un dia duro. Desafortunadamente la otra mama tan maja ya había salido para el paritorio y me quede allí sola con mis dolores. Que noche mas larga, que dolores mas fuertes, no paraba de mirar el reloj y mis contracciones nada que se regularizaban, por fin amaneció y que vistas las que tiene este hospital, le describi a Luca lo que veia por la ventana, la ria, el amanencer, que lindo dia hizo para su llegada.
Ya a las 8am, llamo a la enfermera y le cuento que me he pasado la noche con contracciones pero que aun no son regulares, me revisa y para mi sorpresa tengo 6cm de dilatación, estamos de parto, por fin!
Aquí llego una parte que no me gusto tanto, la lavativa y la rasurada, te sientes un poco como invadida, incomoda; pasando este mal momento llamo a mi marido y le cuento que ya estamos de parto y el pobre a correr.
Aprovecho para decirle a las mamas que me leen, que no todas tenemos contracciones regulares y esto no quiere decir que no estemos de parto, y que en lo posible intentar aguantar en casa lo mas que se pueda.
La matrona que nos atendió fue muy paciente y le gusto que yo estuviera informada del proceso, de la respiración y de las posturas; con ella esta una matrona residente muy joven atenta a todo y al mismo tiempo ayudandonos. Ellas salen y entran, me dejan con mi marido para que practiquemos la mínima sensacion de las contracciones y a pujar, unas veces sale bien y mi marido alucinando por que se ve su cabecita asomar, otras veces no pujamos bien y siento mareo; desafortunadamente despues de pasar toda la noche con contracciones, ya cansada del dolor, sin dormir (bueno durmiendo entre contracciones) pedí la epidural y esto no me ayudo en el momento del expulsivo; hoy día pienso que hubiera podido aguantar sin epidural y con menos pujadas lo habríamos logrado mas rápido.  Le pregunto a la matrona si no puede bajar la dosis de epidural para sentir un poco mas y pujar mejor, me responde que o dolor o sensación, no se puede tenerlo todo, asi que evito tocar el aparatito que sube la dosis del medicamento para sentir lo mas posible mi cuerpo, pero es prácticamente inútil.
Finalmente por sorpresa de todos, en una contracción al pujar, Luca asomo su cabecita mas que las veces anteriores y corrimos al paritorio, su padre va corriendo a ponerse la batita y casi no alcanza a llegar por que no encontraba forros para sus zapatos (calza un 46), el pobre bebe ahi a medio camino, yo casi sin respirar para que no saliera antes y nos perdiéramos ese mágico momento los tres juntitos; este momento le dio tiempo a la matrona residente para aprender mas cosas y para preparar todo un poco con mas calma. Finalmente llego papa, me preparo para pujar una vez mas y para mi sorpresa un suave empujón y escucho a mi pequeñín llorar, no nos dio tiempo ni de pensar y aquí llego el momento mas mágico y maravilloso de mi vida, Luca desnudo, calentito y suavecito en mi pecho, reptando seguramente para mamar, se calma  al escuchar nuestras voces, casi sin llorar nos mira a través de sus diminutos ojitos hinchados, papa grabando el momento y jugando con sus manitas, yo sintiendo su calor, su cuerpecito diminuto cálido y suavecito, sin creerme aun que por fin tenemos a nuestro Luca con nosotros. No sentí cansancio, ni dolor, solo alegría y sorpresa, mirando sus manitas, su carita, sintiendo su calor, que calentito esta, casi quema.
Pasaron unos minutos y se llevaron a Luca para mirarle, y volvió a llorar, yo solo le dije "tranquilo bebe ya te traen de vuelta con nosotros"; a papa le enviaron a recoger nuestras cosas a la habitación, pues nos vamos a otra, Luca llorando dentro de una maquinita con la que le hacían mil cosas, yo sin quitarle el ojo de encima, la matrona me comenta que todo esta perfecto, tanto en el bebe como en mi, ni cortes ni desgarros ni nada, yo alucinando con la capacidad de mi cuerpo y agradecida por haber vivido esta experiencia con tanta paz y alegría y dando gracias por que mi bebe esta perfecto.
Y llego el segundo momento mas maravilloso, me preguntan si le voy a dar el pecho y yo CLARO!, me pasan a una camilla, me tapan con una manta, me traen a Luca ya vestidito con pañal (que le queda enorme), mini batita de hospital y envuelto en una mantita, la matrona me dice que me gire, me abre la bata, coloca a Luca a mi lado, lo acerca al pecho y zas! como si ya lo hubiera hecho antes, se coge del pezón y empieza a mamar con fuerza, yo me río de alegría, las matronas y las enfermeras disfrutan de mi alegría y me dicen "es que este niño nació aprendido y con hambre", que dicha, mi temor mas grande, ha salido perfecto, puedo darle teta a mi bebe sin problemas, puedo alimentarlo con el alimento mas nutritivo del mundo; todas aquellas cosas que otras mamas te han dicho, que ojalá tengas leche, como tu madre no fue lechera tu tampoco, ojalá y se agarre bien, ojala no te duela, ojalá le guste tu leche, tantas cosas que te hacen dudar y tener miedos, y mira allí esta este muñeco, pegado a mi pecho mamando con tanta fuerza y yo sintiendome la mujer mas feliz del mundo.
En la habitación nos esperaba mi cuñada con su familia, mi tía que es como la otra abuela de Luca, y una amiga con su peque Rebeca de 5 meses.
Todos muy felices y emocionados, y yo la mas. En la noche se llevaron a Luca para el nido por que tenían que vigilarle durante unas horas, yo sin querer separarme de el, me preguntaron si quería que lo alimentaran allí para que yo descansara o me lo traían para alimentarle, y yo, traerlo a mi tan pronto despierte por favor. Pensamos que no podríamos dormir de pensar como estaría Luca allí sin nosotros, pero estábamos tan cansados que caímos redondos. A las 3am nos lo trajeron para la teta, llorando desconsoladamente, se agarro a su teti y de ahí en adelante en dos meses casi tres, no nos separamos ni un minuto. Al otro día la matrona y el medico fueron a vernos y todo va genial, nos explicaron que el pecho se da a demanda, que no hay necesidad de dejar llorar al bebe, etc, etc y hasta hoy seguimos con pecho a demanda y atención constante.  Luca es un bebe de 16 meses sano, feliz, tranquilo, inteligente y nosotros los papas mas felices y enamorados del mundo :D

No hay comentarios:

Publicar un comentario